Translate

miércoles, 5 de junio de 2013

Columnas y pergaminos

Ellos hablan,
de las historias que saben
y sus sombras repiten.
Sólo escucho ecos
de lo que nosotras somos...


Mientras, yo,
escondida en tinta,
oculta en otros ojos,
me escribo cada noche
de palabras que olvido,
inenarrable,
imposible de entender,
inacabada.

Aún así
quiero hallarte de piedra
 inmutable,
más eterna que yo
que envejezco,
que cambio...
Me extingo.

Agarrarme a ti
cuando de mi ya no haya nada,
llamarme salvaje,
reconocerte mía,
saber al fin algo de mi que es tuyo.

Pregunto dónde estas en mí ahora
y a tientas me recorro.
Me leo, me toco y
por fin te descubro
en un rincón acurrucada.

Y sin embargo...

De columnas antiguas
y de pergaminos,
de hogueras,
de laurel seco,
de hojas amarillas
me alcanzo solamente.

Una loba acorralada y con bozal de oro.
Soy un espejismo, artificial, palabras.

Descubrirte
en mis dedos,
comprender tu nombre
es lo que intento.

  Y aún por despecho,
    por descuido,
     no te hallo.

Temiendo la oscuridad que te cobija,
pequeñita,
comienzo a balbucearte.
Asustada de mi propia voz,
me llamo mujer por fin,
aún con dudas.